martes, enero 09, 2007

Al derecho y al revés


Detengámonos ahora y por un momento en la razón de ser de las palabras, cuya importancia es con frecuencia desestimada, más aún en éstos tiempos de contracciones brutales y extranjerismos que rayan en la barbarie, que despojan a las palabras de su íntimo significado, que les arrebatan su esencia y las convierten en poco menos que simples herramientas de una mermada comunicación.

Porque hubo otros tiempos, quizá mejores, para las palabras, tiempos en que de su combinación exacta se construían las llaves para ingresar a los Templos Sagrados, tiempos en los que incluso la dirección de su lectura indicaba caminos por sí misma.

Los palíndromos, o palindromas, como son también conocidos, son aquellas palabras individuales o frases perfectamente construídas que se leen lo mismo hacia un lado que hacia el otro. Ésto puede parecernos ahora una actividad más bien propia del ocio, pero no parece haber sido así para quien escribió el misterioso palindroma SATOR AREPO TENET OPERA ROTAS encontrado en los muros de Pompeya, cuyo significado oculto ha sido sesudamente interpretado al paso de los siglos lo mismo como algo similar a "el artesano tiene ruedas para el trabajo" que como un profundo mensaje místico: El Creador tiene las inestables claves de su Obra.

Ejemplos de palindroma son palabras como anilina, y pequeñas combinaciones como luz azul. Frases un poco más complicadas como dábale arroz a la zorra el abad, o aquella otra, la de salta Lenin el atlas, de la autoría del entrañable Julio Cortázar. El maestro Juan José Arreola escribió uno, bellísimo, que reza, Adán se ave, Eva es Nada.

Pero el que sin lugar a dudas me deja atónito por su enorme carga de ingenio, es uno ideado por un chico de menos de diez años de edad, quien en su intento por iniciarse en el complicado ejercicio palindromático creó algo lleno de significados implícitos cuya explicación rebasaría por mucho la mínima cantidad de letras que a él le sirvieron para forjar éste peculiar palíndromo que pongo aquí ahora, para el disfrute del intelecto:
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A veces se ceba

11 comentarios:

el fantasma de la libertad dijo...

Grimalkin,

Maravilloso! Tiene una manera de escribir que lo hace tan ameno de leer...

Los palíndromos siempre me resultaron fascinantes, leí un artículo de de la semióloga Julia Kristeva (si mal no recuerdo, fue hace unos diez años) muy revelador al respecto, y desde siempre me encanta encontrar estos elementos en escrituras sobre todo líricas/poéticas. Alguna vez leí que un compositor contemporáneo, hablando de sus Etudes para piano, decía que una gran obra para este instrumento suele ser una pieza "muscularmente bella" también, es decir, donde el movimiento de las manos, dedos, las tensiones y demás, producían un cierto placer físico al ejecutante (una vez que dominaba la pieza, por supuesto).

Recordaba esto a raíz de que los palíndromos siempre me provocan una sensación linguística similar: un poema atravezado por un palíndromo sensible no solo es una caricia a la inteligencia, sino que, si se lo lee en voz alta, produce un placer muscular en en paladar, en la lengua misma.

Demás está decir que con la crítica al uso actual del lenguaje ya estaba yo de su lado completamente. Podria ampliar, pero se haría un comentario eterno. La cuestión es que la pauperización del lenguaje es algo ya no triste, sino tal vez trágico.

Le dejo a modo de saludo algunos pocos palíndromos que recuerdo, aunque no cito los nombres porque no estoy seguro de recordar bien a los autores:


"Átale, demoníaco Caín, o me delata"
"Sade, no me dé monedas"

y una especie de Haiku palindromático:

"Yo soy augur uruguayo:
voy allá, allá yo voy,
augur uruguayo soy."

Grimalkin el Bardo dijo...

Qué interesante, amigo Fantasma, lo de la "belleza muscular" de las obras musicales... ese es un aspecto de la interpretación que, retomando de vuestro comentario, intentaré disertar próximamente, porque es en verdad determinante al momento de la ejecución, y un punto que no puede pasarse por alto, pero que además ilustra muy bien el tema de la musicalidad en la expresión hablada y escrita. En efecto, los conceptos de ritmo, armonía y tempo emparentan las artes en su conjunto, y aqui, el tema de los palíndromos juega un papel importantísimo como la pieza de ornato y sujeción que pueden llegar a jugar, si el que les usa es lo suficientemente hábil, o por lo menos, afortunado.

Gracias, además, por la aportación de éstos finos palindromas, que vienen a enriquecer el propósito de ésta entrada que usted tan amablemente se ofreció a complementar.

Saludos cordiales

Anónimo dijo...

Caray, ya ni me acordaba de los palíndromas... hay que leer más, verdad? soy buena para el arte del albur y la leperada, pero cuando le eché un ojo a la frase final de tu blog (sin leer completo lo que escribiste) dije: ay, eso como se lee?
Oh, ignorancia...
Jajajaja, ya dejaré de ver tele y me pondré a leer más
:)

Isabel Barceló Chico dijo...

Hay un tan absolutamente simple que quizá no merecería la pena decirlo, pero ya sabes, me pueden mis pasiones:

ROMA
AMOR

Besos, bardo.

Isabel Barceló Chico dijo...

Hay un tan absolutamente simple que quizá no merecería la pena decirlo, pero ya sabes, me pueden mis pasiones:

ROMA
AMOR

Besos, bardo.

Isabel Barceló Chico dijo...

Hay un tan absolutamente simple que quizá no merecería la pena decirlo, pero ya sabes, me pueden mis pasiones:

ROMA
AMOR

Besos, bardo.

Grimalkin el Bardo dijo...

Isabel, ¡qué agradable sorpresa es leerte de nuevo! Y tienes toda la razón, nada menos que la palabra Amor, para definir tu gran pasión. Es una verdadera lástima que la composición de los palíndromos no sea mi especialidad, de lo contrario ya estaría intentando uno dedicado a tí... en su defecto, te agradezco tu visita, y te mando un muy humilde y honrado beso.

Mi querida Isaura, el albur y la leperada tienen también su encanto, y para ellos se requiere no menos cultura y conocimientos que para entender el juego de los pálíndromos. Una buena idea sería armar palíndromos léperos... ese sería el siguiente nivel, aunque las leperadas rara vez hacen buena música tocados al revés...

;)

Gracias por pasar.

Anónimo dijo...

Me impactas, hermano, eso es todo.

Grimalkin el Bardo dijo...

Muchas gracias, hermana... como siempre, me honras.

Anónimo dijo...

Mi querido Grimalkin, como siempre es un gusto leerte; sabes que soy tu admiradora y esta vez me voy a permitir compartir unos palindromas que me han servido en algunos hechizos. Ojalá te diviertan.
Abusón acá no suba
Anula la luz azul de la luna (este me gusta mucho)
Ella te dará detalle
Yo dono rosas oro no doy
Arde ya la yedra.
Recibe un gran abrazo y nos estaremos viendo pronto siempre que el caldero me dé permiso.
Bliminda Labrú

Grimalkin el Bardo dijo...

Estimada Blimunda, qué gusto volver a tener noticias tuyas. Sé que, en efecto, el caldero te ha tenido bastante ocupada en los días recientes, así que aprecio especialmente el que te hayas dado el tiempo de pasar por acá para dejar éste regalo lleno de resonancias e ingenio.

Te mando un abrazo enorme.